14 de noviembre de 2009

Castigo de Dios

Te saldrán granos
Te vas a quedar ciego
No te va a crecer
Se te va a caer a pedazos
Dios se pone triste cuando te ve hacerlo
Cada vez que lo haces, muere un gatito

...

Por eso, cosas como estas, provocan reacciones como estas.

Y el que esté libre de pecado...

5 comentarios:

Alfonso Saborido dijo...

Que se limpie las manos y tire la primera piedra. Pues mira que quieres que te diga. Yo apuntaría a este taller a muchos pederastas. Por lo menos tendrían sus manos sobre sí y no sobre la de los niñitos. Pero por eso, no protestan.

Walt Rawley dijo...

Pues mira, bien pensado no sería mala idea.

Hablando de ideas, sigo con tu propuesta en mente, te lo prometo.

Saludos.

Walt Rawley dijo...

Y tu diras: que propuesta?? Pues mira, es que te he confundido con otra persona. Se llama Alvaro y, no se porque, me han bailado las letras.

En fin, que mil perdones.

Y bueno, si Alvaro se pasa, ya sabe que sigo con su propuesta en mente ;)

adentros dijo...

castigo de Dios...

no sabía que te fuera la copla, jaja...

bueno... si conoces a alguna persona que realemente crea en Dios, sabrás que ni llegaría a coger la piedra del suelo...

por lo que respecta a la noticia, me encantan las iniciatovas educativas, como a ti, será deformación profesional, pero me chirría que un taller de sexualidad mucho más amplio que el normal y necesario conocimiento de la "autoestimulación dirigida" (me gusta más que la palabra "paja", perdóname la cursilería)sea populistamente anunciado y se someta a estúpidos debates...

he leído que al rededor de 20 adolescentes se quedan embarazadas cada semana en nuestro país...con los correspondientes "efectos colaterales... ppfff...

sigue alguién pensando que es gracioso reírse de un taller de sexualidad juvenil??? a quién le importa cuánto dinero se gasta una institición en eso???

Walt Rawley dijo...

Mejor vamos a dejar a Dios aparte, a ver si todavia me van a cerrar esto... :P

Y sí, estoy totalmente de acuerdo contigo. Con todo esto el interés se centró más en la polémica creada (enseñar a los jovenes a autoestimularse de manera dirigida, y encima con gasto público, algunos lo han tomado como la más abobinable de las aberraciones) que en los propios contenidos del taller que, tal y como están las cosas, me parecen totalmente imprescindibles.

Hace tiempo un compañero me dijo que en su instituto los talleres de educacion sexual eran voluntarios... Claro, luego de los "efectos colaterales", que se haga cargo cada uno.