14 de agosto de 2006

Este artículo no iba a ser así

"Las personas grandes nunca comprenden nada por sí solas, y es cansador para los niños tener que darles siempre y siempre explicaciones" (A. de Saint-Exupéry: El Principito)


Estimados niños y niñas :

Tras conocer los últimos acontecimientos, el Hombre del Saco, el Monstruo del Armario, y quien suscribe, hemos celebrado una reunión de urgencia en la que hemos concluido que los adultos ya no nos necesitan para que os vayais a la cama. Así es, niños y niñas, ahora se bastan ellos solitos para aterrorizaros.
Vereis queridos niños, hace unos meses el Monstruo del Armario pasó por el dormitorio de una niña de cinco años llamada Alba. Pura rutina. Sin embargo, cuando se acercó a la cama, vio que la niña no estaba allí, lo cual le extrañó, ya que su familia no tenía prevista ninguna salida para esos días. Al día siguiente, el telediario nos informó de que Alba estaba muy grave en el hospital, y que todo el país temía por su vida. Al parecer, niños y niñas, los papás de Alba llevaban algún tiempo dándole palizas. Hasta que un día su cuerpo no pudo resistir más golpes. No os podéis imaginar el revuelo que se formó aquí. Aunque ya habíamos oido hablar de otros casos parecidos, este era el primero que tenía tanta repercusión en los telediarios y los periódicos. Lo que no nos cabía en la cabeza es que alguien pudiera hacer algo así con una niña pequeña. Hasta entonces, se suponía que los únicos que podíamos asustarles eramos nosotros, y que los papás y mamás estaban para protejerles. Pero empezamos a pensar que nos equivocábamos. Por suerte, Alba salió del coma y, por degracia, todo se olvidó y volvimos a la normalidad. Sin embargo, nosotros que os conocemos bien empezamos a pensar que estabais en peligro. Y hoy nuestras sospechas se han confirmado. Han vuelto a hacerlo. Esta vez ha sido un niño de dos años, Christian, pero no ha tenido la misma suerte. Niños y niñas, Christian ingresó ayer muerto en un hospital infantil. ¿La causa de la muerte? Exacto. Parece que de nuevo las palizas de un adulto, en este caso el padrastro del niño, han tenido algo que ver. Como podeis comprender, queridos niños, esta situación nos desborda. Por una parte, nos hemos dado cuenta de que, frente a estos sucesos, recurrir a nosotros para asustaros resulta, cuanto menos ridículo. Pero, por otra parte, hemos pensado que no podemos dejaros solos ante el peligro. Al fin y al cabo, todo lo que somos os lo debemos a vosotros. Así que hemos decidido hacernos cargo de vuestra protección, ya que aquellos que debían hacerlo parecen haber fracasado. Para empezar, vamos a estar muy pendientes de la hermana pequeña de Christian, de sólo dos meses, y que también presenta serios indicios de sufrir la incompetencia de los mayores.
Antes de despedirme me gustaría informaros de otra noticia, para que tomeis conciencia de la grave situación a la que os exponeis si dependeis de los adultos. Hace unas semanas murió una niña de doce años al intentar coronar un castillo humano en Cataluña. Si, de acuerdo, esta vez pudo deberse a un accidente fortuito, aunque la actividad entrañaba un riesgo considerable. Sin embargo, ese accidente podía haberse prevenido de una forma tan obvia que a todos se nos pasó por alto, y que al parecer algún iluminado por el sentido común ha decidido poner en práctica: ponerles a los niños un casco. Pero claro, ya han aparecido otros lumbreras que consideran que la medida es excesiva. E incluso, entre quienes lo defienden, encontramos a quien justifica su uso como respuesta a "una sensación de culpabilidad inconsciente". No señores, no metamos al inconsciente en esto. El uso del casco es necesario simplemente porque si un niño se cae desde esa altura, se mata.
Llegados a este punto, no podemos más que reafirmarnos en nuestro aviso, niños y niñas: Estais en grave peligro. Por todo ello, desde este mismo momento, os ofrecemos nuestros servicios en pos de vuestra protección, seguridad, y bienestar.
Un saludo afectuoso,
El Coco.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Está visto que por suerte o por desgracia (desgracia en este caso) en estos tiempos se le ha dado la vuelta como un calcetín a todo, ahora los monstruos se dedican a proteger a los niños de sus propios padres.....sin comentarios! :S

Pues nada chico, a seguir palante con este rinconcito que el comienzo ha sido muy bueno!!Un besito!

Walt Rawley dijo...

Pues si, ahora vamos a tener que dedicarnos a poner los calcetines en orden para que esto pare.

Mucha gracias por tu visita, y vuelve cuando quieras chula :)